Montañana repite en el consorcio con el reto de elegir la ubicación del vertedero

El pacto del Botànic sí funcionó ayer en el Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna para elegir presidente al alcalde de Guadassuar. Voro Montañana (Compromís), que afronta su segundo mandato con el reto fundamental de encontrar un emplazamiento para el vertedero comarcal, la tercera pata en materia de infraestructuras que precisa el consorcio para ser autosuficiente en la gestión de los residuos, que además evitará el coste de transportar el rechazo a vertederos ubicados a cientos de kilómetros de distancia.

Montañana reveló haber recibido mientras ejerciía el cargo en funciones el informe elaborado por el Instituto Geológico y Minero (IGME) sobre las condiciones del terreno en los dos únicos municipios que habían manifestado su disposición a acoger el vertedero, Tous y Guadassuar, si bien dijo haber dado instrucciones para que nadie pudiera conocer su contenido hasta la constitución del consorcio -aseguró que tampoco él lo ha leído- y anunció que se entregará a todos los miembros de la asamblea a la vez en una reunión que, según dijo, se celebrará antes de que acabe el mes para abrir el debate. Cabe recordar que el consorcio encargó a esta entidad de interés público que, además, tiene la última palabra en estos casos, un análisis del terreno en los dos alternativas pasibles en busca de la ubicación más idónea. Montañana abogó ayer por el consenso para elegir el emplazamiento, si el IGME avala alguna de las opciones que hay sobre la mesa, y se mostró cauto.

<>, dijo.

El consenso presidió ayer la sesión constitutiva del consorcio, con la única excepción de la abstención de los representantes del PP en la votación que designó a Montañana, a pesar de que los populares ostentarán una vicepresidencia del ente. El resto de grupos, toda la izquierda incluida, respaldó la única candidatura. El Consorcio de la Ribera convocó la asamblea constitutiva sin que la diputación haya designado a su representante por las tensiones vividas en otros consorcios debidos a la urgencia en aprobar los presupuestos del próximo año, la nueva tasa y regular las bonificaciones que se aplicarán a aquellos ciudadanos que más reciclen en los ecoparques, otro de los retos que Montañana señaló como más inmediatos.

Voro Montañana destacó en su intervención que en los próximos meses se completará el segundo reactor de la planta de compostaje, una instalación que ya permite recibir por separado la materia orgánica y que posibilitará reducir el rechazo por debajo del 40%.

Por su parte, el director general de Calidad Ambiental, Joan Piquer, felicitó al consorcio por el consenso que ha presidido su gestión en los últimos años y señaló que el ente se puede sentir orgulloso por tener la planta de tratamiento más moderna de Europa que, según dijo, estará muchos años en el <> en cuanto a eficiencia y recuperación.

caValencià